Velas para el Otoño
Hemos convertido el escaparate de la cereria en un bosque de otoño habitado por animales nocturnos y calabazas encantadas.
En la versión anglosajona del día de Todos los Santos, las calabazas se vacían y sus paredes se agujerean para que la luz de una vela ilumine los dibujos de las caras recortadas. Si no sabéis hacer sopas con los trozos sobrantes, os proponemos directamente estas velas-calabaza.
Pero si lo que os apetece es cocinar, podéis acompañar el pastel de boniato con velas aromáticas de calabaza y decorarlo con terroríficas velas de fantasmas, murciélagos o calabazas de Halloween.